Algunas actividades, entre muchas, que podríamos hacer con los más pequeños para aprender el color amarillo, podría ser:
Jugar con las construcciones sólo de color amarillo.
Poner en la puerta o ventana de cristal un papel celofán de color amarillo para que los niños/as se asomen y puedan ver a través de él.
Garabatear con ceras de color amarillo.
Hacer un mural de un pollito pegando entre todos trocitos de papel de seda.
Estampar nuestras huellas de las manos con pintura amarilla.
Y pedir a las familias que traigan recortes de revistas, dibujos, etc. con el color amarillo predominante, luego en clase lo vamos pagando para crear un mural.
Jugar con las construcciones sólo de color amarillo.
Poner en la puerta o ventana de cristal un papel celofán de color amarillo para que los niños/as se asomen y puedan ver a través de él.
Garabatear con ceras de color amarillo.
Hacer un mural de un pollito pegando entre todos trocitos de papel de seda.
Estampar nuestras huellas de las manos con pintura amarilla.
Y pedir a las familias que traigan recortes de revistas, dibujos, etc. con el color amarillo predominante, luego en clase lo vamos pagando para crear un mural.